Marjorie De Sousa es una de las preferidas del público de "Mira Quién Baila". Y aunque su debut no fue el más aplaudido por el jurado e incluso criticado, a ella lo que más la preocupa es que la vean con hambre o con sueño porque eso la pone de malas y la hace llorar.
Desde la semana pasada, todos los domingos a las 8/7 PM Centro por la cadena Univision, Marjorie junto a otro nueve famosos compiten por ayudar a una fundación y mucho más en la cuarta temporada de "Mira Quién Baila". En el caso de la estrellas venezolana lo que ella busca es perfecccionarse y cumplir su sueño de bailarina frustrada.
"Antes de comenzar todo esto de mi carrera, siempre soné con ser bailarina pero nunca lo había podido hacer y me dije que quizás más adelante", explica y asegura que con "Mira Quién Baila" le llegó esa oportunidad.
Para algunos el hecho de haber estado hasta hace unas semanas protagonizando "Perfume de Gardenia" la pone en ventaja, pero ella dice que aunque le agradece mucho a la obra la seguridad que le dio y a sus coreógrafos todo lo que aprendió, no es lo mismo tener que bailar con técnicas y los diferentes ritmos que algo tan específico con la obra.
Lo que sí la tiene más que entusiasmada es que el público la conozca a ella como persona y no solo a través de sus personajes, ya que siempre le ha tocado que la vean como la villana: "Verán quien soy, mi disciplina, mi obsesión y también que lloro por todo cuando estoy cansada (risas) o cuando tengo hambre", cuenta mientras asegura que ya está lista para mostrar en la segunda gala que puede mucho más aún.
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