Julio César Chávez se vio obligado a cambiar la fecha de su regreso al ring debido a una cortada en el parpado derecho que sufrió durante su entrenamiento.
Originalmente la contienda estaba planeada para el 7 de septiembre en California, pero la lesión impidió que el mexicano siguiera con su preparación para enfrentar al estadounidense Brian Vera.
Chávez Carrasco, quien ya tiene en mano la visa de trabajo para poder presentarse en Estados Unidos, se estaba entrenando en su natal Culiacán, Sinaloa, bajo las órdenes de Vladimir Baldenebro, quien por muchos años fungiera como su manoplero y ahora tomará un rol protagónico.
El 'Hijo de la Leyenda' publicó en su sitio de Facebook que la pelea se realizará el 28 de septiembre: "Se pospone mi pelea para el 28 de septiembre!!".
El ex campeón mundial medio aseguró que con estas semanas de retraso logrará una buena cicatrización de la herida y así podrá presentarse en plenitud de facultades en lo que considera será el inicio del camino a la reconquista del campeonato.
En lo que la lesión cierra, Chávez aseguró seguirá trabajando sin recibir golpes en el rostro, para no perder el trabajo que ha realizado hasta ahora.
Esta decisión no sólo otorgó un poco de tiempo al mexicano, también despertó el enojo de su rival: el mexicoamericano Brian Vera, quien calificó al hijo de la leyenda como “un chiste”.
“No me sorprende que cambie la pelea. Ya lo hizo una vez antes. Pareciera que juega conmigo. Pero que lo siga haciendo, eso me motiva a que cuando yo suba al ring busque más ese nocaut”, sentenció el peleador de 32 años, quien en dos ocasiones anteriores se quedó con las ganas de medirse con el sinaloense.