** Él mismo se precipita hacia el fracaso de su incipiente carrera como mánager, por hablar bastante más de lo que debe.
** Tiene ahora en contra a los peloteros, los ejecutivos, los periodistas y los fanáticos. Todo lo contrario a lo aconsejable.
CORAL GABLES, Florida (VIP-WIRE).- En Dodgers Stadium sufren un intenso drama titulado “Don Mattingly Contra el Mundo”.
Y es que el mánager de los arrogantes Dodgers se ha echado encima a todos los que deberían ser sus aliados...: peloteros, ejecutivos, periodistas y público.
“¡Yo no tengo la culpa (del fracaso de los Dodgers en esta temporada)!”, ha clamado Mattingly.
Y dice que culpables son todos los demás. Pero esa falta de temple, de valor, de jerarquía, no es nueva en el caballero, ahora en sus 52 años de edad. Cuando era capitán de lo Yankees, por los años noventas, el equipo estaba muy mal comenzando la segunda parte de una temporada. Y Mattingly, el capitán, de 30 años, dijo ante los reporteros...:
“¡Quiero irme a jugar a Japón!... Ya no soporto ésto”.
Es decir, el capitán quería abandonar el buque en peligro antes que todos los demás. Y eso lo ví y lo oí. Yo estaba entre esos periodistas.
Y ahora, cuando los Dodgers, quienes firmaron a cuánto estelar pudieron antes de abril, y pagan más de 220 millones de dólares en honorarios en este 2013, el mánager, quien debe ser el más resonante vocero de relaciones públicas, ha expresado insultos como...: “El año pasado logramos mucho más y mejor de nuestras habilidades. Estos peloteros de ahora carecen de espíritu competitivo”.
Y contra los ejecutivos de la organización...: “Se ocuparon solamente de coleccionar nombres famosos, en vez de contratar un róster que pudiera jugar en equipo, por el solo objetivo de llegar a la postemporada. Aquí no hay espíritu ganador, no existe el balance en este equipo”.
El grupo denominado Guggenheim Baseball Management, cuya figura más visible es la sonrisa super-fingida de Magic Johnson, quien fuera estelar de los Lakers, compró los Dodgers el año pasado, por una suma jamás pagada por un equipo de las Mayores, dos mil millones de dólares.
Mattingly fue mánager por primera vez en su vida en 2011 al frente de ese club de Los Angeles, por recomendación de Joe Torre, pero sin ninguna hoja de exitos. Ahora, como es natural, se espera que de un momento a otro lo boten por el presente escándalo que ha armado, a menos que quieran martirizarlo y ni le acepten la renuncia, para que se vea obligado a remar contra la corriente adversa que él mismo inventó.
La ronrisa de Magic Johnson, que más bien parece una mueca, apareció fotografiada en docenas de medios, al lado del nativo de California Adrián González y Carl Crawford, adquiridos de los Medias Rojas en un cambio, y del pitcher Zack Greinke, firmado por 147 millones de dólares.
E hicieron otros cambios por el shortstop Hanley Ramírez, y por el lanzador Josh Beckett.
La verdad es que los Dodgers de este año por dentro parecen un disparate. Otro ejemplo es que firmaron outfielders por 387 millones de dólares, pero Mattingly ha sentado a uno de ellos, el rightfielder, André Ethier, para poner en juego a Scott Van Slyke. Y además, hablan de subir a dos outfielder de doble A, Joc Pederson y Yasiel Puig.
Acerca de sus sorpresivas sustituciones, ha dicho Mattingly...:
“Hago la alineación que creo será más competitiva, con los peloteros que considero jugarán de manera más fuerte”.
Lógicamente, los resuluados no han sido esos.
Porque ni esa estrategia, ni los grandes nombres del róster, ni el nombre del mánager gritón, ni la sonrisa teatral de Magic Johnson, han podido evitar que, con arrogancia y todo, la franquicia de Los Angeles vea sus azules insignias en último lugar en la mayor parte de lo que va de temporada.
Los Dodgers han afirmado a través de sus funcionarios de prensa que no tienen planes de despedir a Mattingly. Pero todos en el beisbol sabemos que esos “votos de confianza”, generalmente terminan siendo la patada en el trasero.
Como publicó Bob Nightengale, en USA-Today...: “Mattingly ha hablado, como si supiera que va a ser botado en las próximas 24 horas”.
Pero un ejecutivo de la organización me confió para este trabajo...:
“Lo dicho por Mattingly nos sorprendió a todos. Ha sido lo contrario de lo que hablamos como planes de relaciones con la prnsa. No, no hemos hablado nada de que él salga del equipo. No se de eso”.
Before You Go
