Marisela Demontecristo, la salvadoreña de 20 años que todos conocen como "La Cenicienta" es la reina de "Nuestra Belleza Latina 2013". La menos pensada, la única que no era favorita, la que muchos apostaban, cuando comenzó la séptima temporada del reality de Univision, que sería de las primeras en ser eliminada. Sin embargo, ella se sobre puso a todo y todos y lo logró. En exclusiva HuffPost Voces te trae las primeras palabras de la nueva coronada.
"Yo aquí entré con un objetivo: con el dinero poder ayudar a mi mamá y poder operar a mi sobrinita que nació con el estómago dado vuelta, con todos los intestinos para afuera. En su momento la operaron y quedó mal. Debe tener una nueva cirugía pero en mi familia no teníamos el dinero para operarla. Ahora sí podré salvarle la vida", dice Marisela más feliz que emocionada, porque como ella misma lo dice está tan en shock que no ha podido llorar.
Marisela, la que ella misma reconoce que era la que menos aptitudes tenía para ganar, que durante todo el concurso se sintió en desventaja frente al resto, reconoce que dio todo por estar en este privilegiado lugar, pero sin embargo ella pensaba que solo sería la segunda finalista: "Yo estoy muy sorprendida de haber ganado, antes que dijeran mi nombre yo le dije a Audris: 'Tu vas a ganar, recuerda lo que te dije al comienzo que tu o Bárbara serían las ganadoras'", nos dice Marisela.
Pero todos sus cálculos fallaron, pues mientras Bárbara terminó siendo la carta finalista, Audris quedó en segundo lugar coronándose Marisela. "Se que me dice 'La Cenicienta' y realmente me siento así. Mi familia es muy humilde y este premio me servirá para ayudarlos", asegura.
Marisela, desde este domingo, además de ser la nueva reina, recibió un premio por 250 mil dólares, un auto, ser la portada de la revista Cosmopólitan, la cara de varias marcas y un contrato por un año en Univision.
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