Abner Mares tiene en mente empatar la marca lograda por Óscar de la Hoya, seis títulos mundiales en diferente división. Claro, si su cuerpo asimila bien el cambio de pesos.
“Yo no tengo miedo de perder. Estoy dispuesto tomar riesgos, a enfrentar a rivales no sólo de gran nombre, también verdaderos retos al boxear, subir a superpluma y probar suerte. Lo que quiero lograr es que la gente me recuerde por grandes pleitos y no sólo por un récord sin derrotas. Que estaría bien conservarlo, pero pues sé que si pierdo lo haré como guerrero”, dijo a HuffPost Voces el peleador mexicano, quien la semana pasada logró convertirse en trimonarca mundial al vencer al duro chihuahuense, Daniel Ponce de León.
Enfocado en conseguir a los mejores rivales disponibles, asegura que no sólo está la posibilidad de subir, también está el regresar a los supergallo.
“La única razón por la que yo podría regresar a los Supergallo se llama Guillermo Rigondeaux. Es el único que me interesa. Si no se da ese pleito, seguiré en esta división en donde también hay grandes nombres, como el de Mickey García, Orlando Salido o Juan Manuel López”, abundó el tapatío que mantiene una foja de 26 victorias, 13 antes del límite y un empate.
A pesar de haber sostenido una batalla por nueve episodios ante Ponce de León, Mares Martínez adelantó que proyecta regresar en agosto o septiembre a los encordados, pero esta vez con una variante: quiere que el pleito sea en México.
Sin rival aún definido y mucho menos una posible fecha, Mares comentó que ya tuvo acercamientos con su empresa promotora y que insistió en que su siguiente cita sea en México, ante su gente, en donde nunca se ha presentado como profesional.
“Lo que quiero es que mi nombre ya no sea mencionado con susurros. Soy una realidad”, aseguró no sin antes destacar que se inclina más por pelear en México que en la cartelera que protagonice Floyd Mayweather o 'Canelo' Álvarez en septiembre.
Sin afán de adelantarse a los hechos, Mares asegura que regresará gradualmente al gimnasio, después de haber tomado un descanso, para después enfocarse en encontrar un rival.
“Sé que los nombres que mencioné son de la otra empresa (Top Rank) y el pleito que hay con la mía (Golden Boy Promotions) no beneficia. Pero más allá de perjudicarme, pues yo puedo tomar otras opciones atractivas, al que se perjudica es al fanático, ellos quieren ver grandes pleitos y no suceden por esa fractura dentro del boxeo”, reprobó el boxeador, quien tuvo que enterrar el sueño de enfrentar al tagalo Nonito Donaire, luego de que las negociaciones fracasaran.
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