Mike Alvarado le tomó la medida a Brandon Ríos y la noche del sábado consiguió vengar la derrota que sufrió en octubre pasado al quitarle la calidad de invicto al 'Bam Bam' con un triunfo por decisión unánime de 115-113, 115-113 y 114-113.
Teniendo como escenario el ring del Mandalay Bay de Las Vegas, Nevada, el peleador de Colorado dominó a base de inteligencia y boxeo a un Brandon Ríos que solo subió con potencia de puños y logró adjudicarse la corona Interina Superligera de la Organización Mundial de Boxeo.
En los primeros tres rounds de duelo, Alvarado tuvo problemas para capotear a Brandon Ríos quien con todo el empuje y fuerza lanzó los golpes de mayor potencia y efectividad. Manteniendo la concentración y apegándose a su plan de pelea, a pesar de los factores en contra como un corte en el párpado y que varias veces fue tocado, Alvarado pudo sobrepasar la barrera del sexto episodio y comenzó a inclinar la balanza a su favor.
Mike Alvarado, tal y como lo había adelantado a HuffPost Voces, hizo uso de su jab y boxeo para sacar de balance a Ríos, quien no se pudo adaptar a un rival con movilidad y que estuvo dispuesto a contragolpearlo.
"Lo dije desde un principio, soy un peleador más inteligente que Brandon y esta noche lo demostré. Trabajé mucho en el gimnasio y esta noche se vio reflejado", dijo tras terminar la contienda Alvarado, quien mejoró su récord a 34 victorias, 23 nocauts, con una derrota.
Mientras que Bam Bam Ríos, enojado por el resultado declaró:
"Yo gané esta pelea, no estoy de acuerdo. Nada más vean como le quedó la cara. Quiero la revancha, estoy listo para ir otros 12 rounds ahora mismo, 24 si el quiere", declaró el pupilo de Robert Guerrero, quien sufrió su primer descalabro profesional debido a que jamás se pudo adaptar al estilo de pelea.