El gigante de Mountain View tiene ganas de mudarse, y para eso está construyendo sus propias oficinas en un complejo de más de 300 mil metros cuadrados. El proyecto lo están llevando a delante con la empresa de arquitectura NBBJ. Se trata del primer edificio de la empresa, ya que hasta el momento las oficinas se han instalado -en todo el mundo- en construcciones preexistentes y adaptadas al uso que Google.
La idea es levantar el nuevo complejo Bay View -cerca de la bahía de San Francisco- desde cero, y prepararlo y acondicionarlo de acuerdo a las necesidades y forma de trabajo de los empleados de la compañía, sin alejarlos demasiado de las oficinas actuales: Googleplex.
El proyecto está integrado por 9 edificios rectangulares de 4 pisos cada uno, con todas las estructuras conectadas por puentes para agilizar la comunicación entre los diversos departamentos de la empresa.
Tal como declaró el ingeniero de Google David Radcliffe, “comenzamos el diseño no desde un punto de vista arquitectónico, sino de la experiencia de trabajo, por eso diseñamos el complejo desde adentro hacia afuera”. El objetivo es optimizar el trabajo y la comodidad de los empleados.
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