Desde 2011 hasta junio de 2012 se reportan 45 suicidios de niños, niñas y adolescentes (NNA), los cuales fueron provocados por la violencia de la que fueron víctimas, así lo dio a conocer la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos.
Ese y otros datos fueron revelados durante la presentación del “Informe situacional sobre la protección de los derechos de la Niñez y adolescencia en un contexto de violencia”. Documento que contó con la colaboración de la Red para la Infancia y la Adolescencia (RIA).
Georgina Ramos de Villalta, Procuradora Adjunta para la Defensa de los Derechos de la Niñez y la Juventud, declaró que el informe destaca cinco temas como los principales problemas que aquejan a los NNA.
Estos temas son: desapariciones, suicidios, asesinatos y acoso dentro de los centros escolares, accidentes viales y la violencia a la que son víctimas durante la migración, como las violaciones sexuales o la trata de personas.
Según la información de la Alianza por la Niñez, Adolescencia y juventud de El Salvador, en los últimos meses han sido asesinados 65 menores de 17 años y 472 jóvenes de 18 a 30 años.
De acuerdo a la PDDH las estadísticas oficiales revelan que, en lo que va del año, la violencia afecta a miles de niñas, niños y jóvenes en el país y que se hace visible también en la violencia entre pandillas, las extorsiones, la violencia sexual e intrafamiliar, los conflictos de pareja, desintegración de las familias, el desempleo, el alcoholismo y drogadicción.
Según datos de la PNC las denuncias de mujeres que sufrieron violencia física en 2011 representaron el 15,37 por ciento. De enero a junio ese mismo tipo de violencia representó un 16,44 por ciento.
Entre los datos recopilados están los brindados por la PNC, entidad que reportó en 2011 4.187 casos entre violencia sexual, intrafamiliar y muertes violentas. Para el 2012, de enero a junio, reportan 2.450 casos.
Entre enero del 2011 y junio del 2012 fueron denunciados un total de 1,552 delitos contra la libertad sexual contra mujeres, consistentes en violaciones y otras agresiones sexuales como estupro y acoso sexual.
El titular de la PDDH, Óscar Luna, el informe revela diferentes causas de la violencia, por lo cual ésta no solo debe atribuirse a las pandillas.
A raíz de los problemas revelados, la PDDH da una serie de recomendaciones a distintas instancias del Estado para que la seguridad de los NNA sea una prioridad y garantice el cumplimiento de sus derechos.
Al Ministerio de Justicia y Seguridad Pública que elabore, sin aún no lo ha hecho o en su caso ponga en práctica, la política de Estado sobre seguridad pública y la política criminal tomando como base el marco jurídico de protección a las niñas, niños y adolescentes.
También, que tome las medidas necesarias e idóneas para dar sostenibilidad al acuerdo entre las pandillas con estricto apego a la Constitución de la República y al marco jurídico salvadoreño, en este sentido, se recomienda la elaboración, en conjunto con todos los sectores del país, de un plan integral que contenga políticas públicas socioeconómicas que busquen la reducción de las inequidades y la pobreza en este país.
También recomienda a la presidencia de la República que lidere un esfuerzo para dar estricto cumplimiento a las recomendaciones formuladas al Estado salvadoreño por el Comité de los Derechos del Niño y en el Informe del experto independiente de Naciones Unidas para el estudio de la violencia contra los niños.
A la Fiscalía General de la República (FGR) recomiendan que esclarezca la muerte de las personas menores de edad que se pretenden justificar bajo la supuesta rivalidad entre pandillas quedando en la impunidad; crear una unidad, sección o departamento para la investigación de los casos de las personas desaparecidas, dotándola de recursos humanos, financieros, tecnológicos y de otra índole necesaria para esclarecer estos delitos.
Asimismo hace un llamado al Consejo Nacional de la Niñez y Adolescencia (CONNA) adoptar acciones específicas e integrales que permitan revertir la situación de violencia.