Zee y Fee son seres que hay que tomar en serio. Bueno, no tanto. Se trata de los nuevos miembros de la familia de los Woogie, que fabrica Griffin. Mediante una aplicación cobran vida, ríen, roncan y se enojan si se los ignora. Son una especie de peluches de cinco patas que sirven para proteger los iPhones y iPods.
Los nuevos artefactos tienen una ventana de plástico desde donde se puede ver el dispositivo. Además cuenta con orificios para conectar un par de audífonos. Así, los teléfonos están libres de las manitas no siempre pulcras de los miembros más pequeños de la familia (se recomienda para niños de 3 a 8 años).
La aplicación, que es gratis, permite a los usuarios escoger una cara, alimentar al Woogie, hacerle cosquillas, vestirlo y peinarlo. A todos estos estímulos responde con gruñidos, risas y carcajadas. Cuando toma una siesta es posible oírlo roncar, pero si pasa mucho tiempo y no es tomado en cuenta es capaz de reclamar.
También les gusta conversar entre ellos. Si se topan entre sí reaccionan a través de bluetooth.
La flexibilidad de sus peludas extremidades permite poner al Woogie en varias posiciones. Y mientras que Zee es la versión masculina, por así decirlo, de esta familia, con su color azul eléctrico, Fee es la femenina, con un rosa fuerte y un enorme moño en la parte alta de lo que podría ser la cabeza.
Los Woogies están disponibles en GriffinTechnology.com y cuestan 24.99 dólares.