Sin duda hay historias de verdadero milagro detrás de una tragedia como la que dejó a su paso por el estado de New York el huracán Sandy. La de Emma Sofía Pimentel Martínez, una beba de 13 días que gracias al esfuerzo de los médicos pudo salvar su delicada vida en medio de la tormenta, es la más grande expresión de que sí existen.
Univision noticias, presentó una verdadera historia de amor, y por sobre todas las cosas de una gran vocación por parte de los médicos. Emma Sofía nació un mes antes de lo pronosticado y por lo tanto, desde hace 13 días vive en una incubadora en un hospital de New York.
Sus padres, seguros que no hay mejor lugar que un hospital para resguarda a su hija de un huracán, estaban en su casa tratando de salvar sus cosas, cuando de repente, en la televisión ven que el nosocomio donde está internada Emma Sofía se había inundado y cortado la luz.
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"En ese momento sentí que se me iba la vida y de repente veo [en la televisión] que están sacando a mi bebé", dice Michael Pimentel, padre de la frágil bebé, que de inmediato intentó como fuera llegar hacia ella.
"Yo tenía que llegar al hospital. Salimos corriendo en el carro y todo estaba cerrado. Yo me quería tirar por un puente", le cuenta a Univision Luz Martínez, madre de Emma.
Sin electricidad, ni tecnología a su disposición, solo la pasión de la profesión de salvar vidas, Michael le cuenta a Univision que los médicos y paramédicos improvisaron un respirador manual en donde soplaban a través de un aparato para darle aire a la pequeña bebé.
Gracias a los doctores y la fe de sus padres, Emma Sofía ahora se encuentra en el hospital Mount Sinai de New York, recibiendo los cuidados necesarios, estable y luchando por crecer y seguir viviendo.
