¿Te das cuenta de lo espectaculares y públicas de algunas proposiciones de matrimonio? Las mujeres que esperan recibir el anillo de compromiso se llenan de expectativas. El novio de hoy está bajo mayor tensión cuando piensa hacer la gran pregunta porque ¿cómo logra que su momento sea más impresionante que otras proposiciones de matrimonio que su novia ha visto?
En seguida le entra el espíritu de competencia. No importa cómo el hombre entregue el anillo y proponga matrimonio, es un momento de nervios más para él que para ella (aunque no lo creas) porque está decidido a rendir su libertad civil y a consolidar un compromiso. Y aunque dicen que es la mujer la que quiere boda, si el hombre no propone, la boda no se dispone.
Ayer y hoy, el hombre era y es quien inicia el evento de bodas y pone toda una industria a correr cuando entrega la sortija. Por eso ni te creas la falacia de que las bodas están en vías de extinción. En Estados Unidos se celebran más de 6,200 bodas diarias, representadas en 23 millones de parejas anualmente y el número va en aumento. Los meses favoritos para bodas son junio, agosto, septiembre y octubre, y el presupuesto promedio es de $20,000, con un promedio de 178 invitados. El total anual de gastos en bodas asciende a $72 mil millones.
Se estiman $19 mil millones en registros de bodas porque el 91% de las parejas separan lo que quieren como regalos. El 80 por ciento se casa en iglesias o sinagogas. El 99 por ciento de las parejas se van de lunas de miel durante 7 a 9 días, con un presupuesto promedio de $3,657. Se estima un gasto anual de $8 mil millones en lunas de miel.
Tradicionalmente, se le decía al novio que solo se apareciera el día señalado y a la hora indicada, pero el novio de hoy participa más en las decisiones y los planes de la boda. Ya que octubre es uno de los meses favoritos para este evento, recordamos al futuro esposo sus ocupaciones básicas, que combinan lo poco que hacía el novio de ayer y lo mucho que se espera del novio de hoy.
- Acompañar a la novia a escoger los regalos del registro
- Preparar su lista de invitados y la de su familia, asegurarse de que se preparen y envíen y dar seguimiento de asistencia
- Gestionar la licencia matrimonial y los documentos para el oficiante de la ceremonia; esto incluye llevar a la novia a los procedimientos requeridos para la licencia.
- Escoger su atuendo de boda y el de su parte del séquito nupcial que son sus ujieres, el padrino y tal vez los hombres de su familia; encargarse de que todos acudan a medirse y a recoger sus atuendos
- Comprar los obsequios de sus ujieres y padrino, preferiblemente personalizados
- Comprar un regalo de bodas para la novia
- Pagar el donativo para el oficiante y el lugar de la ceremonia
- Redactar sus votos matrimoniales
- Escoger cualquier música específica de la pareja y hacer arreglos para que se interprete durante la boda
- Pagar por el viaje de luna de miel (dar a la novia una sorpresa si ella no insiste en escoger el lugar)
- Pagar el aro de matrimonio de la novia. Se supone que la lleve a comprarlo, para que los aros de ambos se parezcan o cada quien escoja lo que le gusta.
- Aprender a bailar si no sabe cómo; ensayar rutinas para el baile de desposados
- Si sus padres no pagan la cena de la noche de ensayo, le corresponde a él.
- Tener disponible mucho efectivo para imprevistos y la luna de miel
- Estar disponible para salir corriendo cada vez que a la novia se le ocurra algo nuevo
- Servir de árbitro entre su familia y la de la novia
- Estar receptivo a aumentar su lista de deberes, de acuerdo a la cultura, el estilo y otros detalles de la boda y de la luna de miel
- Conservar nervios de acero y una sonrisa
- Llegar sobrio a la boda y antes de que la novia llegue
Todavía se acostumbra que los padres de la novia paguen los gastos de la boda, pero hay familias que acuerdan compartir los gastos. En ese caso, la agenda del novio está más ocupada en resolver detalles y colaborar. Si se casan dos adultos independientes, con frecuencia ellos deciden costear el evento y al novio de hoy le corresponde el 50% del presupuesto, excelente ensayo para su vida matrimonial.
Pague quien pague, la boda continúa siendo símbolo de un gran paso, aún para el hombre de hoy. ¿Quién dijo (como se decía antes) que la que se casa es la novia?
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Ve algunos de las propuestas de matrimonio más creativas:
