'Me equivoqué al escribir narcocorridos', dice el compositor Jesse Armenta (VIDEO)

Jesse Armenta: 'Me equivoqué al escribir narcocorridos' (VIDEO)

El corrido es una forma musical profundamente arraigada en la cultura popular mexicana, y durante más de dos siglos fue un fiel acompañante de las clases humildes del país, especialmente de pueblos y zonas rurales. Con su forma literaria sencilla y una simplicidad musical "muy llegadora", el corrido contaba por igual la historia de un héroe, de un episodio patriótico o de un enamorado.

El corrido fue durante todo ese tiempo un eficaz medio de comunicación. Los trovadores se encargaban de hacerlo recorrer toda la nación y su letra se imprimía en volantes que ellos mismos vendían a quienes se acercaban a escucharlos.

De esa forma, el pueblo conoció muchos pormenores que después serían registrados en los libros de historia, de las epopeyas de la Independencia, de la Revolución, y de todos los hechos históricos nacionales.

Pero el corrido, en opinión de sus detractores, con el paso del tiempo, el desarrollo de la sociedad, y sobre todo una enorme influencia mercantil en el ámbito musical y los medios de difusión, le hicieron perder esencia y por lo tanto calidad. Al comenzar a imponerse otros ritmos éstos terminaron por contaminarlo en su forma literaria y musical y cada vez menos compositores e intérpretes se interesaron en seguir cultivándolo.

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Y sucedió lo que quizá era inevitable. En las últimas décadas del siglo pasado el corrido mexicano comenzó a abordar cada vez más temas relacionados con el narcotráfico y surgió el subgénero conocido como "narcocorrido".

El corrido como denuncia social
Cuando los narcocorridos apenas comenzaban a tomar fuerza, alrededor de 1970, en Arizona surgió un joven compositor, Jesús "Jesse" Armenta, que adoptó esa línea con temas como "El contrabando de Nogales", en donde narra la vida de dos personas conocidas por él, -Omar A. y Alejandro L.-, que iban a diario de las pedregosas calles de la popular colonia Buenos Aires, de Nogales, Sonora, a Nogales, Arizona, traficando droga y "otras cosas".

El corrido fue un gran éxito y comenzó a dar a conocer a Armenta en todo el sur de Estados Unidos y México. Pero en realidad no era esa la línea musical que más le interesaba al autor.

"Fue un gran éxito, pero lo compuse porque en realidad no había historias de narcos en los corridos de entonces y porque nunca imaginé el impacto tan negativo que los narcocorridos causarían en nuestra comunidad. Estoy arrepentido de haberlo hecho", afirma Armenta al ser entrevistado en exclusiva para HuffPostVoces.

"Seguí componiendo, pero me enfoqué a lo que de verdad sentía y me preocupaba que eran las historias humanas y con contenido social, especialmente las de los inmigrantes indocumentados que reflejan el esfuerzo de quienes cruzan no sólo de México sino de Centro y Sudamérica, como el corrido "Tres veces mojado", que narra el peregrinar de los indocumentados por varios países hasta llegar a Estados Unidos", explica.

En esa línea social estuvieron otras obras de Armenta como "El corrido de los mojados", "Vivan los mojados" y "Dos monedas", pero abordó también temas románticos y muy pronto logró que numerosos intérpretes famosos se interesaran en sus canciones y las grabaran.

Narcocorridos Jesse Armenta

El corrido de crítica política

Entre los intérpretes más famosos que han grabado temas de Armenta se cuentan los internacionales Tigres del Norte quienes, entre muchos otros éxitos que le grabaron, está el "Circo", una valiente crítica que hace alusión, sin nombrarlo, al expresidente Carlos Salinas y a la política mexicana. La canción resultó un gran éxito y recibió enorme aceptación por parte del público.

"En México no se acostumbra la libertad de expresión y menos la crítica abierta y franca al sistema. Aunque no menciono los apellidos de los personajes, el corrido fue censurado durante varios meses por su contenido y me obligó a alejarme del medio, porque reconozco que tuve miedo a que le hicieran daño a mi familia", sostiene el cantautor sonorense.

¿Quién lo influye como músico?

Mis padres me inculcaron el amor por la música. Ellos se conocieron en San Isidro, Sonora, hoy Buenavista, donde yo nací, un pueblo en el sur del estado que creo que ni aparece en el mapa, en donde hoy existe la Presa Álvaro Obregón.

¿Cuántos años tenía cuando empezó a componer?

Tenía como ocho años cuando escribí mi primera letra, pero en ese tiempo todo lo que escribía lo tiraba a la basura por miedo a que mis hermanos se burlaran de mí. Yo era el "hijo sándwich" entre nueve hermanos.

¿Qué lo motivo a tocar la guitarra?

Mi papá formaba parte del único conjunto de música del pueblo y yo lo veía ensayar; él me inculcó el amor por este maravilloso instrumento y después me regaló una guitarra que me encantaba porque estaba llena de figuritas y calcomanías de animalitos. Soy músico y no pudo ser de otra manera, porque nunca me costó trabajo serlo; soy totalmente autodidacta.

¿Era buen estudiante?

¡No!, nunca fui buen estudiante. Éramos muy pobres, y aunque no es justificación, te diré que tuve que dejar la escuela para irme a trabajar en una gasolinera en San Luis Rio Colorado, que es frontera con Yuma, Arizona. En mis tiempos libres me entretenía escribiendo.

¿Cómo llegó a los Estados Unidos?

De indocumentado y a mucho orgullo. Toda la familia se vino igual.

¿Fue difícil pasar la frontera?

En aquellos tiempos podías pasar con el pasaporte fronterizo, no había cerco… ¡como han cambiado los tiempos!

¿Cuál fue su mayor reto cuando llegó a Phoenix?

El inglés. Pero me preocupé por aprenderlo. Era la época en que había programas bilingües aprobados por el gobierno. Todo esto lo aproveché. Pasé el examen y me inscribí en 'high school'. Recuerdo que en Phoenix existían pocos edificios altos y la población era como de unos 95 mil habitantes.

¿Había hispanos en su escuela?

Sí, la mayoría éramos hispanos. Cuando terminé mis estudios la escuela me consiguí un trabajo en Goldbong Building Products, y me quedé ahí trabajando por treinta años.

¿Sus padres en que trabajaban en Estados Unidos?

Mi padre trabajaba en jardinería y mi mamá en la casa. Era una gran cocinera. Me hacía diario mis tortillas de harina doraditas con huevo, un platillo que solo conocemos los sonorenses. Yo les llamaba "sopitas con huevo" y no podía pasar un día sin comerlas.

¿Cuál fue su primer contacto con la música en Phoenix?

Fue con músicos y cantantes locales, el Güero Chávez y Alberto Pino.

¿Su primera composición?

A la mujer. No me acuerdo cómo nació ese tema y me dije que nunca le iba a escribir a la mujer en esa forma.

¿Cuándo dejó de escribir los narcocorridos?

Dejé de componer narcocorridos porque como hombre vas madurando y ves los efectos en la niñez. Eso me hizo no volver a escribir sobre ese tema. Hacen mucho daño a nuestra sociedad, y aunque ya se están tomando cartas en el asunto por parte de la Sociedad de Autores y Compositores de México para que no se toquen en fiestas públicas, la responsabilidad es de todos, del gobierno, músicos y el público. Hay que hacer algo para que no se escriban letras sobre traficantes y grupos delictivos.

¿Por qué escribir de política?

Porque no puedes tapar el sol con un dedo sobre los problemas sociales y la corrupción de un país como México. En 1996 escribí "El Circo", que causó una gran controversia. Se acababa el sexenio de Salinas y hubo una devaluación por la que él país quedó en quiebra y había que decirlo.

¿Quién se lo grabó?

Lo grabaron Los Tigres del Norte. La presentación del disco fue en Puerto Vallarta, México, y causó una sorpresa muy grande. Se venía venir el escándalo porque la gente de inmediato se dio cuenta que se hacía alusión al presidente saliente. Cuando estábamos en la presentación, Jorge, integrante de Los Tigres, apuntó a la mesa en donde yo estaba y se me vino encima una avalancha de periodistas. De momento se siente halagador pero después empezaron a llegar amenazas. Dejé de ir con Los Tigres a las giras por temor a que me fuera a pasar algo. Es un corrido que tienta los intereses de otros. Lo vetaron en una cadena nacional de México que se llama Radio Centro; pero otra cadena, Radio ACIR, la apoyó. Pero a pesar de los obstáculos hubo muchos reconocimientos al tema en México y en los Estados Unidos.

¿Y cómo inició con temas de ayuda social?

Porque es necesario ayudar en vez de lastimar. Uno de los temas que más éxito ha tenido se llama "Dos monedas", que se ha grabado en diferentes países y se ha utilizado para combatir el problema del alcoholismo en diferentes foros sociales, especialmente por el grupo AA (Alcohólicos Anónimos). Todos tenemos que ayudar a evitar la decadencia del contenido en los mensajes que enviamos a la comunidad. No es fácil comentar esto porque por una parte no estoy de acuerdo con corridos violentos pero al mismo tiempo hay que pensar en la libertad de expresión. Cada quien debe tomar conciencia como lo hice yo.

Creo que todos debemos poner un granito de arena y tratar de influir en la sociedad en forma positiva con temas de ayuda social y humana, o que no contengan mensajes inconvenientes, como por ejemplo el bolero que es romántico, es una línea musical muy bella y que no causa efectos perjudiciales. Hay que invitar a los padres a que se hagan cargo de los primeros pasos de sus hijos. La ayuda musical social es un mundo que yo no había conocido pero por medio de la participación en foros sociales me he dado cuenta de toda lo que existe y creo podemos hacer temas preciosos y retomar que se fomente la música romántica y componerle a la mujer con respeto porque es el ser más importante y fundamental para la inspiración.

¿Es una carrera conveniente la de compositor?

Si, siempre y cuando cambien las cosas. Actualmente hay crisis en la industria disquera. La tecnología y la piratería afectan las regalías de un compositor. Hoy en día no se requiere de una compañía disquera para hacer un disco y menos para vender la música. En las redes sociales basta con bajarla gratis, y eso compite con muchos creadores de música que no tienen los medios para tener un acceso digital barato. Hay que pensarlo mucho antes de ser compositor. Y es una lástima porque hay mucho talento en nuestra gente.

Jesse Armenta continúa viviendo en Phoenix, Arizona, donde labora con su trío y trabaja como compositor y editor en las Editoras Armenta Musical, El Circo Music y Paloma Musical.

Su obra ha sido reconocida con el Premio México y los Premios Furia por sus temas "El Circo", "Quiero volar Contigo", "No le ruegues", "Déjame vivir", "El triunfo", "Ni aquí ni allá", interpretadas por Lupe Esparza (Bronco), Los Cadetes de Linares, Pablo Montero, Graciela Beltrán, Conjunto Primavera, Los Tigres del Norte y muchos más.

Al finalizar la entrevista, Jesse Armenta nos dice que antes de concluir quiere enviar un mensaje. Y fue éste:

"Quiero enviar un mensaje a los traficantes de drogas. Vean las series de televisión sobre narcotráfico y dense cuenta que con lo que hacen ponen en riesgo a sus familias; siempre al final de la telenovela los malos terminan en la cárcel o seis pies bajo tierra. Las consecuencias las acarrean ellos mismos. No hay nada mejor que caminar derecho en la vida. Sé que no debemos dar lecciones de vida porque nadie calza los zapatos de otros, pero yo en lo personal me di cuenta a tiempo del daño, y hoy trabajo y lucho por lograr mis sueños y aplaudo a quienes están en la misma lucha".

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