Cuando hablamos de famosos automóviles de lujo de los años noventa, es necesario que mencionemos a la cuarta generación del BMW Serie 5 (E39), el cual fue estrenado a mediados de esa década, más precisamente durante el Auto Show de Frankfurt de 1995. Este "nuevo" Serie 5 más que presentar una revolución en diseño, propuso una evolución lógica en relación a la generación previa (E34) e incorporó nuevas soluciones técnicas.
No fue hasta el año modelo 1997 que el BMW Serie 5 de cuarta generación llegó al mercado estadounidense, en el cual inmediatamente logró el reconocimiento de varios medios automotrices, producto de su excelente relación entre lujo y deportividad, aspectos que marcaron su máxima expresión en esta generación del Serie 5. Entre los reconocimientos, tenemos el "Motor Trend 1997 Import Car of the Year".
Inicialmente el BMW Serie 5 E39 llegó a Estados Unidos en dos variantes, compuestas por el modelo de entrada 528i y el más potente 540i. En ese entonces, el primero poseía un motor de 2.8 litros y seis cilindros con una potencia máxima de 190 caballos, mientras que el segundo, ostentaba un 4.4 litros V8 de 286 caballos, ambos asociados a una transmisión automática Steptronic de cinco velocidades. Gracias a esta motorización que el BMW 540i rápidamente se posicionó como el máximo exponente entre los sedanes deportivos de lujo, con una aceleración 0-60 mph en solo seis segundos.
Hacia finales de la década, cuando se asomaba el cambio de milenio, BMW presentó a los actualizados Serie 5 de la generación E39, por lo que el 528i se transformó en el 530i, el cual obtuvo un motor de 3.0 litros y seis cilindros, con una potencia de 230 caballos. Aparte de los cambios estéticos que incorporaron a los famosos "Angel Eyes", fue presentado en EE.UU. el nuevo BMW M5, basado en la cuarta generación del Serie 5.
El BMW M5 E39 ha sido uno de los sedanes deportivos más aclamados de la historia, gracias a su motor de 5.0 litros V8 que desarrolló una potencia de 400 caballos, asociado únicamente a una transmisión manual de seis velocidades. Este modelo se caracterizó por sus prestaciones, su comportamiento deportivo "purista" y su aceleración 0-60 mph en cinco segundos y una velocidad máxima limitada a 155 mph.
En conclusión, el BMW Serie 5 E39 es uno de los grandes automóviles creados por la marca de Múnich.
Fuentes: TopSpeed.com, Autos MSN, BMW