Washington (Notimex).- La plataforma del Partido Republicano sobre migración, que presentará en su convención nacional, semeja una declaración de guerra que refleja el carácter extremista de sus políticas hacia los indocumentados, opinó The Washington Post.
En un editorial publicado este martes, el periódico indicó que pese a que el documento que servirá como guía a las políticas republicanas en los próximos cuatro años, reconoce algunas realidades, sus fundamentos rayan “en lo absurdo”.
La plataforma acoge las políticas extremas de Arizona y Alabama destinadas a “hacer miserable” la vida de los indocumentados, critica al presidente estadunidense Barack Obama por bloquearlas y propone castigar a comunidades que no hagan valer las leyes migratorias reteniendo fondos federales.
Además, favorece concluir la construcción de la barda en la frontera con México, en momentos en que el flujo de cruces ilegales a lo largo de esa franja están en su nivel más bajo en 40 años, y a un costo de cientos de millones de dólares.
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Reconoce, por otra parte, la necesidad que tiene el país por mano de obra barata, el insuficiente mecanismo para satisfacer esa demanda y por ende la conveniencia de contar con un programa de trabajadores temporales.
Para el diario, el hecho de favorecer ese programa y presionar a la vez por la deportación de 11 millones de personas con profundas raíces en Estados Unidos, muchos de los cuales son padres de ciudadanos estadunidenses, “no tiene sentido”.
“Todo eso equivale a un reconocimiento de que el mercado demanda inmigrantes de bajos salarios y un rechazo hacia quienes vinieron a este país precisamente para responder a esa demanda”, apuntó.
El rotativo consideró que un escenario hipotético con 11 millones de indocumentados deportados y un programa de trabajadores temporales daría lugar a un caos administrativo y crearía una mayor burocracia federal, en contradicción a su postura de un gobierno de menor tamaño.
Recordó, sin embargo, que las contradicciones en las plataformas del Partido Republicano no son nuevas, pero este año se han visto acentuadas por el asalto de los políticos de línea dura que han tomado el control de su agenda política.
“Quizá este año la plataforma del Partido Republicano deba ser vista como un avance por reconocer la demanda del mercado de trabajadores sin habilidades”, indicó.
“Pero al rechazar cualquier alternativa a la deportación para los inmigrantes que ya están en el país, el partido se mantiene sojuzgado por los extremistas”, señaló.
