La semana pasada, los encabezados de los periódicos registraron el asesinato de Édgar Morales Pérez, alcalde electo de Matehuala, San Luis Potosí, en la región central de México, quien fue atacado por hombres armados mientras viajaba en su camioneta con otras dos personas cuando regresaban de una fiesta de quince años, y el descubrimiento de 14 cadáveres dentro de un auto cerca de allí, en la carretera de San Luis Potosí a la vecina entidad de Zacatecas.
El estado de San Luis Potosí ha sido desde hace varios años blanco de actividades sangrientas del narcotráfico, situación que ha obligado a sus habitantes a modificar sus hábitos, porque de ser una provincia que presumía de tranquila y segura de pronto ha tenido que enfrentar la peor cara de la delincuencia.
Aunque estos sucesos sangrientos se repiten a diario en numerosas regiones de México, HuffPost Voces ha tomado los sucesos recientes de San Luis Potosí como muestra de la situación que sufren actualmente los mexicanos y fue en pos de un empresario residente de ese estado para conocer de manera directa sus sentimientos e impresiones dado que él vive a diario y y de manera directa las consecuencias de esa inquietante realidad.
Jaime Luis González Navarro es un ex piloto de aviación retirado y ex dirigente sindical que hace diez años decidió trabajar el rancho que fuera de sus padres, José Luis y Guadalupe, desde 1973.
“Mi padre compró el rancho porque amaba la naturaleza, y el estado de San Luis Potosí era lo más cercano a su sueño. Tenía todo lo que él buscaba pero especialmente era un lugar muy seguro”, platica. “Me acuerdo que en los años 70 llegábamos a la plaza de la ciudad y podíamos dejar las llaves puestas en el auto y nada pasaba. No había nada que temer. En lo personal eso me impresionó mucho porque yo había vivido siempre en la ciudad de México, que era famosa por su inseguridad”.
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Pero las cosas cambiaron por completo, según afirma nuestro entrevistado. Ahora el Distrito Federal es una ciudad con baja criminalidad y los estados se han convertido en el botín de los cárteles.
¿Para usted a qué se debe la actual inseguridad en el país? ¿Por qué la ola de violencia?
Cuando tienes un estado (gobierno) medianamente fuerte, en general no hay violencia. Hay crimen organizado muy poderoso, como en Asia y la Unión Europea, que actúa silenciosamente porque no quiere llamar la atención de ese estado fuerte. La violencia existe en México porque hay un estado débil donde los controles judiciales y administrativos colapsaron. Otro problema es que al salir los sistemas autoritarios se perdió el control. No hay que olvidar que la corrupción en México está en tercer lugar en el mundo y esto hace que el país sea tratado como mercancía. No hay controles acordados democráticamente porque no existen políticos honestos. En los países débiles como México se dan grandes enfermedades, entre ellas la violencia.
¿Por qué son las matanzas?
Por la lucha de los grupos criminales para obtener el control de las plazas.
¿A qué se debe que regresó la violencia después del proceso electoral?
Por lo general durante el proceso electoral no se tiene la certeza de quién va a quedar en el poder, después los intereses propios de los grupos son los que actúan. Y viene el reacomodo.
¿Se ha degradado la política?
Definitivamente. Y no es porque llegue al PAN o el PRI o el PRD u otro partido sino que la degradación política se vio venir cuando entró el neoliberalismo del presidente Carlos Salinas. Yo no soy ningún experto pero lo que sí sé es que cada día aumenta el número de pobres en el país.
¿Por qué se da esa situación?
El modelo de Salinas dio más poder a los ricos y a las empresas. Por ejemplo, cuando yo trabajaba como piloto ganaba el doble de lo que les pagan actualmente. ¿Cómo es posible que una familia viva en una economía como la de México en donde ganas la mitad de lo que ganabas hace diez años? Yo estoy seguro de que si se sigue privilegiando al capital la solución no va a llegar.
¿Esta es la causa del narcotráfico en México?
Mira, en el 98% de los países del mundo existe la violencia organizada, pero lo hacen de forma callada. Y esto es porque, insisto, en otros países existe un estado fuerte. Mientras en México la pobreza vaya en aumento va a fortalecer a la delincuencia.
¿Cuando empezó la delincuencia en México?
Siempre. Pero el narcotráfico me parece que se venía gestando desde hace mucho.
Botín de los cárteles
¿Va a parar la violencia y el tráfico de drogas el nuevo presidente?
No. Si cuando entró Felipe Calderón había 40 millones de pobres y cuando sale hay 50, esto te habla de que los negocios ilícitos y de poder proliferan hoy en México. Esto no es más que una respuesta a la pobreza. Esto no lo cambia ningún partido político.
¿Quién lo para?
Los movimientos sociales. Cuando una comunidad se junta logra cambios aunque son por lo general a largo plazo. Por eso lo que está haciendo el poeta Javier Sicilia con su Caravana por la Paz es auténtico. Y por supuesto habrá que ver la forma de que los sistemas judicial y político no sean corruptos.
¿Lo que hace Sicilia tiene tintes políticos?
Cuatro de cinco movimientos sociales tiene algún apoyo político, eso no lo podemos negar; pero el de Sicilia es un movimiento legítimo que va a fortalecer al estado mexicano.
¿Cuánto más va a durar la violencia en México?
Cuando todos cambiemos de mentalidad y nos unamos en un mismo proyecto. Que dejemos de hacer chistes del narcotráfico y la violencia y cuando los políticos, jueces y líderes religiosos se den cuenta de que vivimos en un mismo país. Parece que todos vivimos en un país diferente. Y lo vimos con los candidatos a la presidencia que todos ven un diferente país. Los cambios se van a ver cuando la gente se ponga a trabajar como debe y se quite del modelo neoliberal. Todas las formas políticas, culturales y religiosas deben ser más tolerantes y unirse. Nuestra gente tiene un gran potencial para salir de la pobreza.
¿Usted como agricultor ha sido afectado por la violencia en el estado de San Luis Potosí?
No soy ningún experto en cómo evitar la violencia. Heredé un rancho familiar y hace años que lo estoy sembrando. Venir a San Luis Potosí era muy seguro y ahora llega al grado de que no tienes tiempo ni de subirte a tu coche cuando de repente encuentras un fuego cruzado, o simplemente te despojan del vehículo. Por esas razones mi familia no viene al rancho. Pero sé que en todo hay riesgos en la vida, y tiene que seguir a pesar de lo que pase. En una sociedad siempre hay cuotas de sangre. No es que las necesitemos, pero existen.
Jaime Luis González Navarro no cree que los movimientos políticos vayan a cambiar a México y afirma a HuffPost Voces que son los hombres como Javier Sicilia y los movimientos sociales como el que encabeza el poeta los que trascienden y hacen la diferencia porque sus tiempos no son los políticos.
“Son otra categoría y tienen otra perspectiva de lo que significa llevar a México a fortalecerse”, concluye.