Lo que omites en el gimnasio: deja de cometer errores

Lo que omites en el gimnasio y afecta tu rutina

Sácale el máximo a tu membresía en el gimnasio con estos tips. Muchas veces no se trata de lo que haces en durante tu entrenamiento, sino lo que no estás haciendo. Estas son algunas omisiones comunes entre las mujeres con suscripciones a gimnasios, no sólo no le están sacando provecho a su inversión, sino que se están perdiendo de estos beneficios:

No usas las pesas "pesadas"

Es intimidante ir al área de pesas libres, pero no estás logrando nada al quedarte con esas pesitas rosadas en una esquina. "Se tienen dos tipos de fibras de músculos: lentos y rápidos. Si no utilizas las pesas más pesadas, estás descuidando toda una serie de fibras musculares, las rápidas, que son importantes para moverse rápido, levantar objetos y para la estabilidad de la espina y las caderas", dice Michele Olson, profesora de ciencia del ejercicio en la Universidad Auburn en Montgomery.

No debe preocuparte el volverte musculosa, porque no sucederá. "Las mujeres no pueden agrandar mucho sus músculos porque tienen poca concentración de la hormona masculina testosterona, la que es necesaria para agrandar los músculos de manera que se note", añadió.

No utilizas tu torso durante el ejercicio cardiovascular

Si tu sesión de ejercicio cardiovascular involucra la trotadora, la bicicleta estacionaria o la máquina de subir escaleras y no utilizas tu torso, no quemarás tantas calorías. "Utilizar tu torso puede ayudar a aumentar el número de calorías quemadas y desarrollarás mayor resistencia. Los atletas con los mejores sistemas cardiovasculares son los nadadores y los de esquí campo traviesa, que involucran el movimiento de brazos y piernas", dijo Olson, quien recomendó utilizar máquinas que incorporen aditamentos para ejercitar los brazos.

No tienes un plan

Existen regímenes de ejercicio si deseas perder peso, correr una maratón u obtener mayor flexibilidad. "Existen ejercicios específicos para cada una de estas metas y no son intercambiables. Si no creas un programa que se enfoque en tus necesidades y deseos, puedes retrasar los resultados o crear cambios que no necesitas o que no son apropiados para ti", aconsejó Olson.

Tu mayor objetivo (pérdida de peso, resistencia, fuerza) debe influir el volumen (la cantidad que se hace), intensidad (cuán ligero o pesado) y el método (cardio, ejercicios de resistencia, estiramiento) de cada sesión, por lo que Olson recomienda reunirse con un entrenador que evalúe tu nivel y cree un programa específico para tus metas.

No te empujas lo suficiente

No se trata de pasar dos horas en el gym, sino de con qué intensidad te ejercitas. El ejercicio debe ser divertido, pero si haces tu cardio mientras lees una revista y hacer la misma rutina gastada de pesas, es posible que no obtengas los resultados que deseas.

"Al inicio es difícil y no parecerá divertido, pero una vez tu cuerpo se aprenda los movimientos de ciertos ejercicios y tu fuerza y resistencia mejoren, es momento de alterar tu programa. Muchas investigaciones han confirmado que aumentar los niveles de actividad traerá mayores beneficios y mejorará notablemente el estado físico y la apariencia", expresó Olson.

Y no se trata de pasar más tiempo en el gym, sino de la calidad del ejercicio. Los expertos recomiendan entrenamiento de intervalos con una variación de intensidad de niveles. "Si aprendes a ir más allá apropiadamente, también podrías beneficiarte de un metabolismo más alto después del ejercicio – lo que significa que seguirás quemando calorías después de terminada la sesión".

No aprovechas a los expertos disponibles

"Si tu gym tiene entrenadores, terapistas físicos, nutricionistas o dietistas registrados, ¡utilízalos!", recomienda Olson. Estos pueden identificar aspectos de tu entrenamiento que pueden ayudarte o que te estén afectando o hasta prevenir lesiones. Para perder peso son especialmente recomendados porque la nutrición es clave para lograr esa meta.

Te vas sin estirarte

El dejar el gym sin estirar es uno de los errores más comunes entre las personas que se ejercitan, dice Olson. Después de la sesión es el momento ideal para estirar, porque los músculos están calientes y el flujo sanguíneo cuenta con mayor oxígeno.

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