En la recta final del proceso electoral en México, a 11 días del cierre de campañas y a 13 de la cita en las urnas, las baterías de los candidatos y sus campañas contra sus contendientes se centran en acusaciones y cuestionamientos por escándalos mediáticos que llegan más allá de las fronteras.
Así, acusaciones de compra de paquetes de promoción, espionaje telefónico, vínculos con el crimen organizado, y cuentas de gastos de campaña que no salen hacen ruido aunque no se comprueben.
Espionaje, fraude y asesoría extranjera
El equipo de campaña de la candidata oficialista Josefina Vázquez Mota (PAN) presentó, en un medio de comunicación, presuntas pruebas de que el candidato Enrique Peña Nieto (PRI y PVEM) financió espionaje telefónico cuando era gobernador. Acusación lanzada desde el segundo debate entre candidatos presidenciales.
Fue el coordinador de campaña, Roberto Gil, quien presentó a través de una mesa de análisis en medios, una copia fotostática de un estado de cuenta por el que se habrían pagado dos millones de pesos a la empresa “Seguridad Privada Inteligente Proveedora de Soluciones”, desde la cuenta de una supuesta dependencia mexiquense, como prueba del argumento de su candidata.
El cuestionamiento mayor en últimos días se ha dado entre los responsables de las tres principales campañas quienes han elevado el discurso de confrontación.
El columnista político Raymundo Riva Palacio asegura que “los candidatos mantienen una estrategia aséptica en la cual se enfocan en sus mensajes y propuestas. Para pelearse en el lodo se encuentran sus asesores.”
Para la campaña de Peña Nieto, los cuestionamientos llegaron primero por revelaciones de que habría pagado “por debajo de la mesa” una campaña positiva de su imagen a Televisa desde 2005, en su mandato como gobernador del Estado de México.
Tras el tema del espionaje, siguió una demanda por fraude por 56 millones de dólares contra colaboradores de su círculo más cercano por un empresario de medios en California y el cuestionamiento por ambas campañas al anuncio de que, de ganar la presidencia, integrará como asesor de seguridad a Oscar Naranjo, ex jefe de la Policía Nacional de Colombia y reconocido por el desmantelamiento de las FARC y el cartel de Medellín.
Tanto Andrés Manuel López Obrador, candidato de la alianza de izquierdas entre PRD, PT y Movimiento Ciudadano; como Josefina Vázquez Mota, del oficialista PAN, no dejaron pasar esto para evidenciar a su contendiente. Sus partidos llamaron a la autoridad electoral a indagar los convenios de Peña con los medios. Una queja por “adquisición encubierta de tiempo en radio, televisión y revistas” fue formalizada.
Mientras que la publicación del diario británico fue rechazada por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y Televisa –quien incluso presentó una queja ante la Press Complaints Comission-, señalando que los archivos son caso juzgado como parte de una antigua denuncia en la que no se pudo confirmar la acusación. Sin embargo el golpe al priista tuvo impacto y resonancia, en momentos en que el movimiento estudiantil #YoSoy132 cuestiona la manipulación de medios.
El 7 de junio, The Guardian publicó archivos electrónicos filtrados por “una fuente que trabajó con Televisa” que señalan que la mayor televisora del país habría vendido a Peña un tratamiento positivo en sus principales noticieros y programas, lo que puso en escena y con nueva perspectiva, cables del Departamento de Estado filtrados en agosto de 2011 por WikiLeaks.
Peña Nieto acusó a López Obrador de orquestar la campaña “desde tiempo atrás” con información falsa. Insistió en que tienen “tintes político electorales”.
Así, el 14 de junio llegó el nuevo escándalo con la denuncia por la empresa Frontera Television Network (FTN), que incluye a Erwin Lino, secretario particular de Peña; David López, vocero; Luis Videgaray, coordinador de la campaña; y Roberto Calleja, vocero del PRI por incumplimiento de un contrato millonario para realizar una campaña de promoción de Peña en territorio estadounidense (algo prohibido en la legislación mexicana). Esto revivió las peticiones de los partidos de derecha e izquierda al Instituto Federal Electoral (IFE) para hacer una revisión exhaustiva al priista. Una nueva queja se formalizó por el PRD.
La campaña de Peña y el PRI precisaron que esto es parte de un intento de extorsión, desconocieron a los empresarios involucrados, y negaron haber autorizado a persona alguna para pedir dinero o servicios en apoyo a la campaña. El segundo charolagate de la campaña.
El primero fue la revelación de una cena en mayo pasado donde colaboradores de López Obrador, acompañados del estratega brasileño Luis Costa -del que han negado sea asesor de la izquierda-, solicitaron a empresarios 6 millones de dólares para la campaña. El embate priista en ese momento señaló que esa petición viola la ley electoral y los topes previstos en ella.
Fotos de las campañas presidenciales:
Elecciones en México
“Honestidad Valiente”, un segundo “Amigos de Fox”
Para el candidato Andrés Manuel López Obrador, los cuestionamientos llegaron por el PRI quien ha acusado a la campaña de la alianza Movimiento Progresista de tener un doble financiamiento a través de la asociación civil ‘Honestidad Valiente’, la cual le permitió crear el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
El coordinador de campaña de Enrique Peña, Luis Videgaray puso el tema en la mesa al promediar en 1,200 millones de pesos el gasto que habría hecho el izquierdista de 2006 a 2011, cuando recorrió el país al menos en dos ocasiones. Incluso el PRI comparó esta organización con ‘Amigos de Fox’, que fue cuestionada en su momento.
La respuesta no se hizo esperar, y el coordinador de izquierda Ricardo Monreal señaló que esas son “sus cuentas alegres” para justificar el informe de The Guardian, que “sí exhibe cuánto pagaron (el PRI)” y que la cuenta de la AC está cancelada desde 2011. Aunque, a la petición de sus contrapartes de mostrar las cuentas, éste mostró evasivas, argumentando que quien acusa debe de probar lo dicho y si al PRI le interesan esas cuentas que las consigan.
Sin embargo, el candidato anunció que dará a conocer esta semana las operaciones de ‘Honestidad Valiente’ y ante los cuestionamientos priistas de que la asociación no estaría registrada ante la administración tributaria precisó que sí se pagaron impuestos. También insistió en que los ataques son debido a que sus contrincantes están nerviosos por su repunte en las preferencias, que lo ubican en segundo sitio y acercándose al puntero.
El PRI, en tanto, anunció que interpondrá dos quejas contra la alianza de izquierdas, una ante la autoridad electoral y la segunda ante la fiscal.
En tanto, un cuestionamiento más se inició desde el segundo debate contra López Obrador. Esta vez el vocero fue el propio presidente Felipe Calderón quien cuestionó su propuesta de sacar 300 mil millones de pesos bajando los salarios de la alta burocracia.
“Si el gobierno despidiera a todos los altos funcionarios, de director a Presidente, ahorraría 2 mil mdp. No 300 000 mdp ½ sueldo 1 000 (sic)”, tuiteó Calderón Hinojosa durante el debate.
Un día después el secretario de Hacienda, José Antonio Meade, reiteró los números del primer mandatario.
Aunque recibió respuesta de Fernando Turner, quien sería Secretario de Economía de López Obrador, quien explicó que de salarios podrían ser 128 mil millones de pesos pues la nómina expuesta por Meade no tomaba en cuenta muchas dependencias, agencias gubernamentales, paraestatales y organismos públicos descentralizados.
Riva Palacio destaca que en estos momentos en las campañas “abunda la propaganda negra y la guerra sucia donde nadie ha salido bien librado”.
Josefina y sus vínculos con presunto lavador de Los Zetas y “gracias por participar”
Los cuestionamientos a la candidata del PAN, Josefina Vázquez Mota son para que aclare el préstamo de aviones del veracruzano Francisco Colorado Cessa, luego de que en la última semana, Estados Unidos lo incluyera en su narcolista de los más buscados; considerado lavador del cártel de los Zetas.
El PRI no desaprovechó esta oportunidad y planteó que otras líneas a indagar en el caso del empresario deben ser la postulación de hermanos de éste como candidatos del PAN y los contratos que le otorgó Petróleos Mexicanos (Pemex).
Las bitácoras de vuelo hechas públicas revelan que la panista viajó en la aeronave en 2010 para dar apoyo a candidatos de su partido en Veracruz y Zacatecas.
Previamente, al inicio de la semana se reportó un nuevo golpeteo a la panista; la aparición de espectaculares en los sitios que recorre en su gira, sin firma, que dicen "Adiós Chepina. Gracias por participar".
Este golpeteo al panismo se le atribuyó a la lideresa magisterial Elba Esther Gordillo; con la orquestación de una campaña que incluye espectaculares, mantas, bardas, carteles y vehículos. Y aunque esto no se pudo constatar, el PAN presentó una queja ante el IFE contra la Agrupación Política Nacional Movimiento Indígena Popular y la empresa Printer de México.
Para el analista político, la temperatura está alta por “los aireados debates” entre los coordinadores de campaña, que cruzan acusaciones que luego se tornan en spots, así como por los fenómenos de comunicación que son las redes sociales.