Seis aspirantes a remplazar al procurador del condado angelino se verán las caras el martes 5 de junio, cuando se efectúen elecciones primarias en California.
Será la primera vez en más de 10 años que alguno de los candidatos tome el lugar de Steve Cooley, el actual procurador que fue elegido para ese puesto en 2000 y cuyo periodo termina el diciembre.
Sin embargo, como suele suceder en las contiendas previas a la elección general, se espera poca participación de los votantes, aun cuando esta elección ha sido una de las más reñidas en estas primarias.
Hasta ahora, Carmen Trutanich, procurador de Los Ángeles, es el contendiente con más reconocimiento y el que ha recaudado más fondos para su campaña. Hasta la fecha ha acumulado 1.4 millones de dólares, más del doble que sus rivales más cercanos, los subprocuradores del distrito Alan Jackson y Jackie Lacey, de acuerdo con un dato que revela el Daily News.
Analistas consideran que aun con esta ventaja, lo más probable es que Trutanich tenga que pasar a una segunda vuelta, que será en noviembre. La única forma de evitarlo es si el procurador consigue la mayoría de los votos, 50 más uno. De otra forma enfrentará al segundo que obtenga más votos el martes 5.
“Trutanich es probablemente el candidato que lleva la delantera, pero la pregunta persiste: ¿Conseguirá el 50 por ciento más uno, o tendrán lo suficiente los otros candidatos para impedir que gane en la primera vuelta?”, dijo Robert Stern, presidente del Center for Governmental Studies al Daily News.
Será “inevitable”, dijo Cooley a ese diario, quien luego de 12 años se retirará de ese puesto.
El color de la contienda, aunque no ha dejado de ser de acusaciones mutuas y de ataques hacia el desempeño sobre todo de Trutanich, ha tomado un nuevo matiz, en comparación con las contiendas de hace una década, como lo señala el diario Los Angeles Times.
En esta ocasión, la seriedad en las discusiones ha sido la nota a resaltar. Los seis candidatos han hablado en sus campañas de la necesidad de crear programas de prevención y rehabilitación de delincuentes no violentos en lugar de simplemente meterlos a la cárcel.
Además de los tres candidatos mencionados, contienden para el puesto los abogados de la procuraduría Danette E. Meyers, John L. Breault III y Bobby Grace. Varios de los seis postulantes han expresado que el electorado ha dicho claramente que quieren a los criminales violentos tras las rejas, pero que creen que el sistema de justicia puede hacer más para prevenir los delitos, dice la nota de Los Angeles Times.
El cambio se debe a que durante más de una década las cifras del crimen han bajado y a que la crisis financiera del estado ha forzado a los funcionarios a tener más en cuenta los altos costos de encarcelar a los delincuentes. Los candidatos han recalcado que es necesario que se reserven los espacios en las cárceles para quienes lo merecen justo cuando el estado está liberando a muchos reclusos de las prisiones de los condados antes de que concluyan sus condenas.
“Todos lo entienden”, dijo a Los Angeles Times Lacey. “Gracias a dios se fueron los días en que la gente decía, ‘Voy a encarcelar a todo mundo y a tirar la llave’”.
Todos los candidatos han dicho que darán más recursos para cierto tipo de delitos, como la contaminación ambiental, la corrupción en oficinas de gobierno y los delitos cibernéticos.
Además, los candidatos han propuesto agregar más programas de intervención para delincuentes no violentos, desarrollar iniciativas para impedir que los niños se escapen de clases y expandir los tribunales que otorguen condenas alternas que den tratamiento a los enfermos mentales, drogadictos y otros delincuentes de bajo perfil en lugar de cárcel.